¿Cuántas veces se te ha acercado alguien diciendo que tiene una idea genial para un negocio, pero que no se la quiere contar a nadie para que no se la roben? Si así́ empieza esta persona, lo más probable es que nunca ponga ese “fantástico negocio” o que se caiga en el intento.
Hubo oportunidades en que algunas grandes ideas han tenido éxito como negocio, pero más cierto es que por cada uno de esos emprendedores con grandes ideas, cientos de otros han alcanzado el éxito con negocios que ya existían.
Lo que debe tener en cuenta un emprendedor es que las ideas son importantes, pero en lo que se tiene que concentrar es en las oportunidades. Fernando Trías de Bes resume así́ el tema en ‘El libro negro del emprendedor’: “Una oportunidad puede basarse en una nueva idea o en una idea ya existente pero que se puede ejecutar de forma diferente. O de igual forma, pero en un lugar distinto. En todas estas situaciones uno puede tener éxito o puede fracasar. Todo depende de la manera cómo se ejecute el proyecto. Sin embargo, creo que desarrollar una oportunidad basada en una idea ya existente reduce el riesgo, ya que cuentas con más información de partida”.
